La belleza de los libros usados

¡Hola a todos! Hoy les traigo una nueva entrada, en este caso tampoco es una reseña, pero es una cosa de la que llevo tiempo queriéndoles hablar: los libros usados, y la belleza que representan. Porque verán, una cosa es ir y comprar un libro nuevo: es algo fácil, las librerías suelen tener un stock muy variado y si bien a veces se puede complicar conseguir algún que otro libro, mientras exista en catálogo y no lo hayan sacado, siempre algo se puede arreglar. Pero, cuando hablamos de librerías de usados, la situación es distinta, y todo se basa en algo sencillo: la oportunidad. 

Obviamente, cada lector es un mundo, y cada uno busca de manera distinta en usados. Hay gente que busca un libro en particular que sea usado para abaratar los costos de lectura, y si bien en lo personal muchas veces me voy ilusionada con la idea de encontrar un libro que hace tiempo deseo, sé que en definitiva lo único que importa es el azar: no tengo forma de prever con que libro me voy a encontrar, sólo tengo que ir y pispear, alerta a encontrar alguna que otra joyita. Y a veces, simple y sencillamente, se da. Antes de mostrarles algunos ejemplos, voy a pasar a contarles mi método de busca en el canje de libros usados al que suelo ir, que está ordenado en mil estanterías con miles de libros. Hay una especie de compartimentos donde todos los libros están uno atrás de otro, y uno los va pasando como si fueran fichas de dominó, buscando que se esconde en la estantería. Mis objetivos cuando voy al canje son:

1. El libro tiene que estar en buen estado. No es de quisquillosa, ni tampoco es algo que cumpla siempre a rajatabla, pero así como yo cuido a mis libros, me gusta que aunque sean usados estén en buenas condiciones. No soy capaz de traer un libro que parezca mascado, que este roto, que le falten páginas o que este muy sucio. Después de todo, para leerlo tengo que ponerle las manos encima, y cuando están muy lastimados me dan hasta cosita, y no puedo evitar pensar en quien pudo ser tan insensible como para dejarlo en esas condiciones. 
2. El libro tiene que interesarme. Esto es el segundo paso de selección. Aunque a veces el libro me interesa mucho y puedo ceder un poco en el estado, la combinación perfecta sigue siendo un libro en buen estado y que me interese mucho, o que el estado pueda cambiar de manera artesanal, haciendo uso de mis habilidades. 
3. El precio. Hay gente que se abusa, y vende los libros en buen estado y usados a precio de nuevo. Eso no me gusta, para nada. Si bien cada uno vende el libro al precio que se le canta, me parece que hay gente que se va de tema. He visto libros usados siendo vendidos incluso a mayor precio que en librería. Una vez me paso de un señor que me quería vender un libro usado de Carrie Fisher por 400 pesos, y cuando miro en Book Depostory cuanto salía, había una diferencia tal que con lo que pagaba el del señor me terminé comprando dos en Booky. Personalmente, y por lo que he hablado con otros bloggers, creo que lo más correcto es venderlos en la mitad del costo de librería, o en 2/3 del precio nuevo. Más de eso es un abuso, ya que es un libro usado. que a uno le puede haber costado dinero, pero en su nueva venta no ganan ni el autor ni la editorial ni nada, sólo el lector que decide desprenderse del libro. Y eso es un poco injusto para todos (más si esta muy cerca del precio nuevo). Es triste que muchas veces engañen a personas que por ahí no tienen ni idea del costo real del libro. Pero bueno, como digo, respeto la libertad de cada uno de hacer con sus libros lo que se les cante, ya que los pagaron y demás, pero no me parece bien aprovecharse de otro lector. Nos tenemos que cuidar entre nosotros. 
4. No compro colaboraciones. Esto creo que es algo en lo que muchos coincidimos, pero, si te dieron un libro gratis, no lo vendas. Regalarlo, donarlo, intercambiarlo por otro son opciones buenas, y en las que no lucras con algo que te dieron a vos y en lo que vos no invertiste dinero. Si, entiendo que una vez que realizaste la reseña se puede considerar que el libro es tuyo, ya que intercambiaste tu labor por el libro, pero hay muchos BBB que no logran colaborar con algunas editoriales y para los que probablemente ese libro hubiera significado mucho y que tenían muchas ganas de leerlo, por lo que no deja de ser egoísta que lo vendas para sacarle dinero. Yo suelo intercambiarlas o regalarlas, pero sólo si fueron libros que odié con toda la fuerza de mi corazón (lo que significa que si fueron 3 en todos estos años, es mucho), o en el caso de tener otra edición del libro, para dejar tranquilo al psiquiatra de salud laboral, quien parecía muy preocupado por mi tendencia a llenar mi espacio de libros. Aún así, no deja de darme un poquitito de culpa que las colaboraciones dejen mi casa, y al final suele ser casi siempre por una cuestión de espacio que porque realmente quiero que se vayan.
5. Si es una saga y no coincide la edición, no lo traigo. Esto es porque soy quisquillosa, y me gusta que coincidan en la estantería. No siempre pasa pero al menos lo intento. 
6. Aprovecho la oportunidad. Esto amerita un ejemplo. Un día yo no iba por la vida planeando comprar un libro. Básicamente no había mucha plata, pero me tenté y pase por la vereda del canje, sólo para mirar la vidriera. Y lo vi. Ahí, esperándome, brillante y hermoso. Un libro que estaba en mi lista TBR de Goodreads desde que más o menos me hice la cuenta. Un libro que un par de semanas atrás estuve a punto de sacar, convencida de que nunca lo iba a conseguir. Un libro inesperado, que se convirtió en una de mis mejores lecturas del año pasado: La invención de Hugo Cabret. La emoción que tenía por al fin tener ese libro en mis manos aumento exponencialmente cuando vi a cuanto lo vendían en MercadoLibre, sintiendo que, a pesar que debía arreglar un poco el libro, había sido tremendamente afortunada. Un hallazgo en un millón. Y si bien no me sobraba la plata, fue una de las mejores inversiones literarias que hice. Por 250 pesitos (en ese entonces, un poquito más de 10 dólares), me traje una lectura maravillosa. 

Ahora llega la parte que más de uno está esperando... Los ejemplos. De algunos colocaré imágenes y de otros no, todo depende de que tenga disponible para ilustrar la situación...

Mi top ten de compras de usados

1. La invención de Hugo Cabret, de Brian Selznick. Creo que nadie puede dudar que este fue uno de mis mejores hallazgos. Inesperado en todo sentido, una lectura excelente que encima me salió barata. 

2. Memorias de Idhún I - La resistencia, de Laura Gallego García. Otra joyita perdida, que encima si mal no recuerdo me salio 150 pesitos. Casi muero de un infarto cuando lo veo y empecé a llamar a gritos a mi hermano para que me llevara cosas para canjear. 

3. Historia del rey transparente, de Rosa Montero. Un libro que empecé en la secundaria de la biblioteca y tuve que devolver. Nunca supe como terminaba, así que lo tenía en la mira para ver si se conseguía usado. Casi me desmayo cuando lo veo. No tengo dudas de que me esperaba a mí. 

4. The Testing (trilogía completa), de Joelle Charbonneau. Estaba buscando lotes de libros por MercadoLibre cuando lo vi. Eran los tres libros en inglés, unas ediciones fabulosas, por 700 pesos creo. No lo dudé y los compré. 

5.Coma, de Robin Cook. Vi la miniserie en la que trabaja Richard Dreyfuss y quede obsesionada. Quería ese libro a toda costa, pero ni asomaba por el canje. Lo compré por MercadoLibre a 35 pesos hace 6 años. Me salió más caro el envío, obviamente. 

6. Amy y Roger de Morgan Matson. A pesar que todavía no lo leí, era un libro que me generaba mucha curiosidad, ya que si bien de entrada no me llamaba la atención, no dejo de escuchar excelentes críticas de la autora. Encima, los libros de la editorial suelen ser carísimos, y una amiga lo vendía mucho más barato. Adentro. 

7. La saga de Spiderwick, los 5 tomos, por Holly Black y Tony DiTerlizzi. Cuando vi los 5 juntos no podía creerlo. No llevaba la plata encima en ese momento (había salido a jugar a PokemonGo, no a pasear por el canje), pero entramos con un amigo y termine reservando los libros (para ir a buscarlos 20 minutos más tarde, obvio). 

8. La fortaleza digital, de Dan Brown. Luego de Ángeles y demonios y de El código Da Vinci, estaba enamorada del estilo del autor. Cuando vi La fortaleza digital junto con mi mamá, no lo dudamos y lo trajimos. 25 pesos de ese entonces. Que belleza cuando los libros salían dos dígitos nomás (?

9. Flashfoward - Recuerdos del futuro, de Robert J. Sawyer. Similar a Coma, vi la serie y la padecí (sobre todo en su cancelación, espero que el karma los encuentre algún día). La historia está buenísima, y desde que supe que existía un libro lo anduve buscando. Hasta que un día lo encontré y empecé a gritar. Literal. Hay testigos que lo acreditan.

10. Tomo 2 y 3 de la saga Millenium en edición grande, de Stieg Larsson. Este es uno de los hallazgos que más disfruté. Resulta que tenía el primero y el cuarto en edición grande. Los había leído de la biblioteca hace mucho tiempo, así que la idea era comprarmelos cuando pudiera. Pero cada vez estaban más caros así que veía lejos la posibilidad de gastar tanto en un libro que ya había leído. Pero aparecieron en el canje y... Se mudaron a mi biblioteca. Un clásico. 

Ahora estoy un poco curiosa... ¿Cuáles son sus técnicas/requerimientos para comprar libros usados? ¿Compran libros usados o son algo loquitos y prefieren sólo los libros nuevos? Los leo en los comentarios.