La biblioteca prohibida, de Dave Connis

 ¡Hola a todos! Probablemente no me hayan extrañado demasiado, pero, yo, como me doy cuenta mientras dejo que mis dedos recorran el teclado, si los extrañe. No voy a hacer falsas promesas de no volver a perderme porque todos sabemos que no me funcionan, pero si voy a intentar, por el bien de mi salud mental, permanecer más por acá. La pandemia me bendijo con mucho trabajo, pero debo aprender más a cuidarme y a bajar un cambio, al menos de tanto en tanto. Así que hoy, con dedo fisurado incluido, les traigo una reseña de una de las mejores lecturas de lo que va del año. 

Título: La biblioteca prohibida
Autor: Dave Connis

Año de Publicación: 2019
Páginas: 320
Editorial: Ediciones Urano (bajo el sello Puck)
ISBN: 978-84-92918-80-5
Sinopsis: Clara Evans queda horrorizada cuando descubre la lista negra de 'los libros prohibidos' propuesta por el director de la Academia Lupton. La novelas icónicas que figuran en ella han sido retirados de la biblioteca y no estan permitidas dentro de las instalaciones del instituto. Y a cualquier estudiante que atrapen con alguno de estos libros deberá enfrentar un severo castigo. Muchas de estas historias han cambiado la vida de Clara, es por eso que no piensa quedarse de brazos cruzados viendo como el director abusa de su poder, y decide tomar medidas. Dentro de su taquilla, Clara comienza una biblioteca clandestina, y hace transacciones con libros como Habla! o La guerra del chocolate. Pero cuando uno de sus libros más preciados queda unido a una tragedia inesperada, se ve obligada a asumir su papel en toda esa situación. ¿Será capaz de hacer las paces con sus sentimientos en conflicto, o luchar por esta causa noble será demasiado difícil de soportar para ella?
¡Muchas gracias a Ediciones Urano por el ejemplar!

Opinión personal

Como algunos ya sabran (y como creo que a muchos nos pasa), desde que comenzó la pandemia me volvi mas mood reader todavía. Me cuesta engancharme con los libros, y me pongo impaciente y termino salteando entre lecturas. Sin embargo, desde que empecé este libro, no pude soltarlo. Me poseyó por completo, con su estilo sencillo y cándido, con ese amor por los libros que supura en cada letra y que me recordó tanto a La ladrona de libros, uno de mis libros preferidos. Me habian recomendado (e insistido en múltiples ocasiones) este libro, prometiéndome una historia sumamente llevadera, y encontré tanto más. Este libro es un perfecto ejemplo de porque los libros juveniles también merecen ser llamados literatura, ser leidos,amados y adorados por gente de todas las generaciones.

Este libro es la segunda novela publicada por el autor, quien parece no temerle a los temas complicados. Habiendo tratado en su primer libro el tema de adicciones, en esta novela se mete con un tema que puede parecer que no nos toca de cerca, aunque eso es una cuestión de perpesctiva (si te da curiosidad porqué, seguí leyendo hasta el final). La forma en que el autor trabaja el asunto de los libros vetados o prohibidos, imprimiéndole toda la pasión del mundo, capaz de traspasar las páginas hasta el lector, es magnífica. Su ritmo, sus reflexiones, los capítulos y frases cortas capaces de transmitir mil veces más que los testamentos que a veces estamos obligados a leer y que terminan siendo mucho gregre para decir Gregorio. Es imposible que leyendo este libro no te den más ganas de leer a Dave, y no sientas un poco de curiosidad por lo que pueda presentarnos a continuación. 

En La biblioteca prohibida nos encontramos con Clara Evans, una lectora empedernida que descubre que su escuela lleva un buen tiempo prohibiendo libros, y no cualquier libro, sino todos aquellos que tratan de algun tema incómodo del que los adultos suelen no preferir hablar en voz alta, a saber: salud mental, abuso, trastornos alimenticios, diversidad sexual, religión; entre otros. Y entre esos libros, se incluye el nuevo libro preferido de Clara, por lo que todo esto ya se torna un poco personal. ¿Qué autoridad tiene alguien para decir que algo que es capaz de hacerla sentir tan bien puede ser considerado peligroso?

Si bien todos estamos en conocimiento del amor de los estadounidenses por definir el bien y el mal como un blanco y negro, y por eso puede no resultarnos tan loco que decidan cancelar libros, creo que es algo que también nos toca de cerca a los latinoamericanos, y a Argentina en especial. Muchos de nuestros autores insignia fueron proscriptos durante la dictadura, como Cortázar o María Elena Walsh, disminuyendo en algunos casos las reediciones de algunos autores, como Facundo Cabral. E incluso, si nos venimos a tiempos más actuales, para quienes creen que la dictadura ya pasó, los invito a pensar en el sesgo que muchas escuelas tienen a la hora de incluir libros en sus propias bibliotecas, como eso aplica en los libros que nos dan a leer en la secundaria, y las palabras que proferimos/recibimos si alguien lee algo diferente. Recuerdo como en mi escuela no había un solo libro completo de Galeano, como me sentí en cierta forma agredida por la profesora de lengua cuando dije que lo leía, y que había preferido ese libro frente a uno de Rosa Montero, quien me cuestionó que como iba a saltar de estilo/género tan incoherentemente. Ese es solo un ejemplo que se me ocurre, pero los invito a pensarlo y a comentarme que otro ejemplo se les viene a la mente. 

Clara es una chica para quien los libros son lo más importante del mundo, los ladrillos que la construyen. Esta llena de buenas intenciones, aunque deba doblegar un poco las reglas para conseguir buenos resultados. Su mejor amiga, LiQui, es una excelente estudiante como ella, aunque tiene un poco menos de amor por los libros. El Sr. Caywell, el bibliotecario, es uno de los personajes que más disfruté, aunque me hubiera gustado verlo presentar batalla más duramente. El director Walsh es un personaje que me daba tanta curiosidad como bronca, cuyo crecimiento, por llamarlo de alguna manera, me encantó.

El final de la historia tiene un gusto agridulce en mi opinión, aunque creo que hace un planteo maravilloso. Este es un libro para replantearnos tanto lo que leemos como cómo lo leemos, y poder apreciar la libertad de siempre leer lo que queremos. De cabeza a las mejores lecturas del año, de seguro. 

Frases preferidas

Cada libro me hizo quien soy. Cada página me construyó pieza por pieza.

Los libros son salvajes, no puedes controlarlos. Las personas son salvajes, tampoco puedes controlarlas

 Recomendado

Si te gustó La ladrona de libros, este libro te va a encantar.