Un verano en Abril, de Cecilia Saia

¡Hola a todos! Me está costando un poquitito retomar el ritmo de las reseñas ahora que tengo tiempo libre, pero de a poco voy a lograr terminar una. En este momento tengo un par de reseñas empezadas, pero es como que no avanzo con ninguna. Vamos a ver si con esta tengo suerte... 

Título: Un verano en Abril
Autora: Cecilia Saia
Año de Publicación: 2018
Páginas: 240
Editorial: Montena
ISBN: 978-987-3820-70-0
Sinopsis: Abril tiene veinte años y su vida es bastante maravillosa: estudia medicina para convertirse en pediatra, como su papá; está de novia con su amor del secundario y sueña con casarse y formar la familia perfecta; tiene muchos amigos; una familia que la banca, todo es como debe ser.
Hasta que un día, una pieza de su rompecabezas se rompe y la imagen perfecta que ella tenía de su vida se desmorona estrepitosamente. Su novio decide que ya no quiere seguir con ella y Abril cae en una profunda crisis y tristeza que no logra superar. De pronto, nada tiene sentido.
En un intento por escapar de su realidad que tanto la hiere, Abril decide pasar el verano en la antigua casa de campo de la abuela de su amiga Marina, donde pasó tantos veranos de felicidad. Pero allí también las cosas se desmoronan: una obra de remodelación y su arquitecto la sacarán de la paz y el letargo y le moverán el piso (literal y simbólicamente).
Allí descubrirá un diario del bisabuelo de su amiga, un famoso escritor muerto ya hace décadas y la búsqueda personal mutará a una intensa investigación donde la clave no será tener todas las respuestas sino tener la valentía para hacerse todas las preguntas.
¡Muchas gracias a Penguin Random House por el ejemplar! 

Opinión personal 

De un tiempo a esta parte, los lectores nos hemos visto confrontados por la publicación de libros por parte de youtubers, y en ese momento entró en juego el prejuicio, el mismo que solíamos tener ante un libro cuando el mismo era escrito por personajes de nuestra farándula, léase Moria Casán o Ileana Calabró... Solo que en estos tiempos de redes sociales la farándula se reformuló y contiene más gente que antes, incluyendo así a todos esas personas que nos divierten día a día por redes, en una multiplicidad de formatos. Así se dividieron las aguas, entre quienes juzgan a los libros simple y sencillamente por su origen, sin siquiera mirar de que trata y quienes los aman, en gran parte por la persona que está detrás. Yo, en lo personal, me encontré siempre dentro del primer grupo, pero, dado que siento que muchas veces me pierdo libros que luego son super amados por culpa de ese prejuicio, dije "me voy a animar y lo voy a pedir... seguramente me termine gustando". Además, obviamente, la portada me tenía enamorada (Comentario random: si alguna vez publico un libro espero que sea una portada así de bonita, con mucho azul y estrellitas).

Cuando llego mi momento de enfrentarme al libro... Digamos que no alcanzó a cumplir mis expectativas. Hay muchas cosas que son perdonables a los autores, sobre todo a quienes recién empiezan, pero otras que no son tan fácil de disculpar, sin importar si es un autor previamente conocido por otra actividad o no, y una de ellas es la investigación, que creo que es una de las cosas que más me molestó de este libro. Siento que hubieron fallas en plantear cosas pavas, como la materia que cursaba Abril, o unos detalles acerca del funcionamiento del Registro Civil entre los años 1920-1926. Y si bien eran todas pequeñas, no dejaban de hacerme ruido, en conjunto con cosas como la personalidad de Abril, que me resultó un poco incompatible con su edad (y también con el hecho que sea estudiante de medicina, pero porque mi realidad en ese ámbito y la de mis compañeras es bastante diferente). A eso se le suma una narración algo desprolija, pero a la vez sumamente llevadera, ya que, por suerte, se lee bastante rápido y entretiene (aunque al principio, sinceramente, prefería sentarme a estudiar que a leer, ya que no me resultaba para nada agradable). El resultado es una historia tibia, para pasar un rato, con algún que otro momento memorable en un mar de clichés (que no fueron pocos, créanme). 

La historia es, en resumidas cuentas, una chica a la que el novio le corta (todo en off, ya que a él lo conocemos muuuuuucho después) y sufre una crisis existencial, porque esas cosas a veces escapan a las películas norteamericanas y suceden en plena UBA, a una estudiante de medicina. Creo que básicamente lo que me molesta de la situación era la dependencia que tenía la chica para con su novio, en una especie de relación super tóxica, que aún después de terminada se ve prolongada por indirectas y otras ridiculeces que no parecen para nada propias de una chica de 20-21 años. Y en este deambular de "me dejó, mi vida no tiene sentido, no sé quien soy", una amiga le ofrece que se vaya a pasar las vacaciones a una casa que tiene la abuela que está por ser reformada. Ahí se encontrará (o reencontrará?) con un arquitecto y con la parte más interesante de la trama, que son los cuadernos perdidos del bisabuelo de la amiga, que esconden una historia sumamente importante y relevante. Esto me recordó un poco a la historia del detrás de Los nombres perdidos, y fue la tercera cosa que me impulsó a leerlo. Es una trama muy interesante, que aún con algunos errores de fechas me fascinó, y me hubiera gustado quizás que fuera más desarrollada en algunas cuestiones. 

En cuanto a los personajes, creo que ya hablé bastante de Abril, nuestra protagonista: una chica que se siente básicamente que su vida es perfecta hasta que se da cuenta que nunca se hacía las preguntas correctas, todo porque... la dejó un chico (perdón si insisto, pero me cuesta superarlo). Obviamente evoluciona, y la Abril del final del libro me cae bastante mejor que la del principio, sobre todo cuando no me concentro en las escenas clichés salidas de telenovela venezolana. Por otro lado, Max, el arquitecto, es un personaje que me gustó mucho y que no me resultó forzado en ningún momento. Luciana, una amiga que conoce en esta historia, es uno de los personajes que más disfruté, por su autenticidad y por su sonrisa constante. Mis personajes preferidos fueron Memé, la dueña de la casa donde se queda Abril, de quien si bien no conocemos demasiado, se disfruta muchísimo sus intervenciones, que recuerdan mucho a abuela; y por otro lado, los padres, en especial el padre, de Abril, quien es médico pediatra pero sumamente cariñoso y compinche con su hija. 

El final es lindo, bastante romántico y si bien nos trae a una Abril madura siento como que hizo el crecimiento a medias y quedó algo abierto. Muy de película, digamos, y me faltó ese plus que solemos encontrar en los libros. En definitiva, no es el peor libro que leí en el año, pero también quedó bastante lejos del mejor: está en el medio. Lo bueno es que no me quedé con la duda acerca de si me perdía algo...

Frases preferidas

• Porque a veces, todo lo que necesitamos es alguien que nos abrace mientras la tormenta que sentimos por dentro explota hacia afuera.
• ¿Cuándo te olvidaste que sos la protagonista de tu propia historia?

Recomendado

Si te gustó Mi primer amor, un gran error o Los nombres perdidos.

PD: parece que con esta reseña tuve suerte...